Y…Hasta cuando los pañales?
Le agradecemos a la Lic. Micaela Gurny por sumarse al equipo de soymultimama.
Hoy analiza un tema que a más de una mamá nos preocupa y ocupa: Y… Hasta cuándo los pañales? :
La tarea de ser padres no es nada fácil. Ellos están marcados por sus historias, la de sus antepasados y también por la sociedad en la que les toca vivir.
Los hijos de a poco van creciendo y van apareciendo distintos logros madurativos: comienzan a sonreír, a sentarse, a gatear, a caminar. Atraviesan diferentes duelos, dejan la mamadera, el chupete, la cuna… ¿Y los pañales? ¿Hasta cuándo?
En estos últimos años fui detectando que el período de uso del pañal en los chicos se fue alargando.
¿Cuáles son las causas? ¿Quiénes las causan? ¿Los padres, los chicos, los pediatras?
Se escuchan distintas versiones sobre el tema: “El pediatra dijo que lo tiene que decidir el niño”. “Tiene que dar un indicio”. “Nosotros tenemos que estar seguros para que él los deje”. “Prefiero esperar a las vacaciones de verano, ahora es mucho lío”, “por ahora no, recién nos mudamos”.
El control de esfínteres implica una maduración orgánica, pero a la vez se deben suceder dos elementos fundamentales: el niño debe comenzar a caminar y a hablar.
A través de la utilización del lenguaje, los chicos, van dominando los objetos y también su cuerpo. De esta manera van pudiendo anticipar y expresar lo que sienten y perciben. En estos momentos es común escucharlos decir: «¡Me hago pis!», «¡Quiero caca, mamá!».
Pero a la vez poder dejar el pañal y hacer las necesidades en el baño, es una tarea que enreda la capacidad de espera y la sumisión a las normas: en cualquier lugar no se puede hacer, sólo en la pelela o en el baño. De esta manera, se va armando un vínculo de intercambio con el otro. El niño va a ceder la satisfacción de hacer pis y caca en los pañales para aceptar la voluntad y el deseo de sus padres. El control de esfínteres marca un acontecimiento importante en la aceptación de normas culturales por parte del niño.
Y ¿cuándo se sacan los pañales..?.
Entre los dieciocho meses y los tres años y medio los niños comienzan a controlar los esfínteres y de esta manera se produce la primer negociación: “Cedo a hacer donde me dicen, a cambio de que ellos (papá, mamá) cedan en otras cosas”. Esto es clave para entender las conductas de los hijos, ya que comienzan los famosos “berrinches”. Una mamá me decía: “Hace unos días que mi hijo está terrible, me hace un lío tremendo para ir al jardín. Si no le doy caramelos antes de entrar a la sala, se pone a llorar, se tira al piso”. Indague sobre el origen de esta conducta y pude detectar que los caprichos de su hijo coincidían con haber comenzado a controlar los esfínteres.
Pero ¿Qué es lo que acontece en estos tiempos en relación con las normas, que se ha prolongado el uso del pañal en los chicos?
Actualmente las consultas son por las dificultades en los vínculos paterno-filiales. Según Beatriz Janin: “Frente al desafío a la autoridad que todo niño suele hacer, el adulto se siente anulado como tal, se siente sin lugar. Esto se agrava cuando el adulto espera el reconocimiento del niño para sostenerse como autoridad.”. (B., 2011). Los niños están determinados por la mirada de los padres, quienes a veces, no tienen la capacidad de espera, viven pensando en el ahora sin tener proyectos a futuro, no aceptan las normas, las diferencias, el paso del tiempo y frente a cada indagación que hacen sus hijos se sienten interpelados. ¿Cómo podrán entonces, sus hijos, tener la capacidad de espera, resignar la satisfacción inmediata y poder sumirse a la norma necesarios para el control esfinteriano?
Ocurre que los niños quedan, en muchas ocasiones, a merced del “poder” que le otorgan los adultos y esto produce consecuencias psíquicas muy importantes.
Ser padres no es fácil y conlleva la difícil tarea de indagar sobre los propios ideales, las normas y el dar lugar a la diferencia y al paso del tiempo.
En el caso de los padres de gemelos, mellizos o trillizos, es muy importante que los padres dispongan de tiempo físico y mental para reconocer las singularidades de cada uno de sus hijos en los aspectos concernientes al control de esfínteres ( la motricidad, el lenguaje). De esta manera, podrán ir acompañándolos respetando el tiempo y las particularidades de cada uno en el logro del control de esfínteres.
Poder aceptar y transmitir las normas como asimismo las diferencias posibilita en los hijos logros psíquicos muy significativos, que continuaremos pensando en otros artículos.
Fuente: Lic. Micaela Gurny (M.N 48.399) –Lic. en Psicología (UBA), Especialización en Psicoanálisis con niños (UCES), Ex Docente de Nivel Inicial-
Cel.: (011)15-6848-0353,
Mail: info@micaelagurny.com.ar
Consultorios: Palermo y Caballito
photo credit: Daniel Kulinski via photopin cc
Muy interesante la nota. Una gran ayuda para padres y cuidadores!!!